Muchas veces nuestro potencial cliente puede sentirse entusiasmado por muchas opciones de fragancias y quiere probarlas a todas.
Pero presta atención a esto: el olfato puede saturarse. Al cabo de unas cuantas pruebas puede que tu cliente no logre distinguir los olores y forzar la nariz puede dar como resultado una experiencia negativa.
Para lograr que tu cliente viva una experiencia olfativa satisfactoria sigue los siguientes pasos:
Lo primero que debes hacer es tratar de acortar la lista de muestra: pregúntale a tu cliente si ya tiene alguna preferencia hacia determinados tipos de perfumes: amaderados, cítricos, florales, dulces, delicados o potentes.
Según el grupo que elija, muéstrale las opciones que tienes y cuéntale la composición y las notas de cada uno. Hazle ver los envases, su lenguaje visual también forma parte de la elección.
Ten a mano un vasito con granos de café: te será sumamente útil para “borrar” el olor a perfume de la nariz y poder seguir con la muestra.
Cuando detectes hacia qué tipo de fragancias se inclina, ofrécele opciones similares hasta que encuentre la que le convenza.
¡Ya estás listo para brindar una excelente experiencia olfativa para tus clientes!
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